Jueves
Los que me conocen bien, saben que "Jueves cobarde", no es simplemente una canción de un tipo que admiro. Los jueves cobardes, existen en mi vida. Pero lo que ustedes no saben, es por qué los llamo de esa manera.
Hubo un día (jueves logicamente) en que ella me dejó, era la mujer con la que me quería ir del mundo, con la que quería pasar al cielo, los dos juntos tomados de la mano. Bueno, no pudo ser, un jueves ella dijo: basta!... se había cansado de mis desplantes infantiles, de mis canciones sin argumentos y de mis declaraciones de amor blancas. Ese día me dijo que nada de eso podía servir para volver a estar a su lado y fue así.
Hice mis mejores textos, saque mi corazón en cada letra de esa hoja, y ella se preocupaba más por atender el teléfono, que por leer mi "obra". Desde ese jueves, nunca más tuve jueves comunes y corrientes como la mayoría de las personas; claro que no, mis jueves comenzaron a ser tristes, distraídos y cobardes. Cuando escuché esa canción me sentí, totalmente, identificado... cada oración, cada palabra, cada letra. Parecía que el tipo me conocía -en realidad era así, me conocía-, que sabía mi historia. "Y te declaro la guerra, y tu me firmas la paz"... no podía ser tan real, no podía en una simple y roñosa frase (inventada en un bar de mala muerte de España) tener tanto de verdad en mi vida.
Entonces mis jueves comenzaron a degradarme, a suicidarme de a poco, a cortarme en pedacitos la paciencia, las ganas de no ser yo. Me ganaban, usualmente me daban revancha... pero núnca podía con ellos, tenían más experiencia que yo. Tenián más años sobre la tierra que yo, y su nombre había sido nombrado por ella, más veces que el mio.
Pero bueno, uno se acostumbra y a veces se olvida... hasta que un martes te la cruzas por la calle y te acordás que pasado mañana te toca.
Pero apareciste vos, y nada volvió a ser igual... de a poco los jueves se convirtieron en el día anterior al fin de semana y hasta hoy fue así. Hoy, después de un mes y medio, volvieron los jueves cobardes y no podés hacer nada contra ellos, asi como llegaron se irán y así como algún día se fueron, pueden regresar... los jueves cobardes, como vos... son parte de mi vida y no hay nada que podamos hacer, ni vos, ni yo. Repito. Ni vos, ni yo. Es así, no puedo evitarlo...
Hubo un día (jueves logicamente) en que ella me dejó, era la mujer con la que me quería ir del mundo, con la que quería pasar al cielo, los dos juntos tomados de la mano. Bueno, no pudo ser, un jueves ella dijo: basta!... se había cansado de mis desplantes infantiles, de mis canciones sin argumentos y de mis declaraciones de amor blancas. Ese día me dijo que nada de eso podía servir para volver a estar a su lado y fue así.
Hice mis mejores textos, saque mi corazón en cada letra de esa hoja, y ella se preocupaba más por atender el teléfono, que por leer mi "obra". Desde ese jueves, nunca más tuve jueves comunes y corrientes como la mayoría de las personas; claro que no, mis jueves comenzaron a ser tristes, distraídos y cobardes. Cuando escuché esa canción me sentí, totalmente, identificado... cada oración, cada palabra, cada letra. Parecía que el tipo me conocía -en realidad era así, me conocía-, que sabía mi historia. "Y te declaro la guerra, y tu me firmas la paz"... no podía ser tan real, no podía en una simple y roñosa frase (inventada en un bar de mala muerte de España) tener tanto de verdad en mi vida.
Entonces mis jueves comenzaron a degradarme, a suicidarme de a poco, a cortarme en pedacitos la paciencia, las ganas de no ser yo. Me ganaban, usualmente me daban revancha... pero núnca podía con ellos, tenían más experiencia que yo. Tenián más años sobre la tierra que yo, y su nombre había sido nombrado por ella, más veces que el mio.
Pero bueno, uno se acostumbra y a veces se olvida... hasta que un martes te la cruzas por la calle y te acordás que pasado mañana te toca.
Pero apareciste vos, y nada volvió a ser igual... de a poco los jueves se convirtieron en el día anterior al fin de semana y hasta hoy fue así. Hoy, después de un mes y medio, volvieron los jueves cobardes y no podés hacer nada contra ellos, asi como llegaron se irán y así como algún día se fueron, pueden regresar... los jueves cobardes, como vos... son parte de mi vida y no hay nada que podamos hacer, ni vos, ni yo. Repito. Ni vos, ni yo. Es así, no puedo evitarlo...
8 Comments:
Una pena que hayan vuelto
Una pena que no puedas sacarlos de tu realidad
Una pena que pienses que no se puede hacer nada al respecto...
Te repito, cada día es una elección... por mucho que hagamos el resto, hasta que vos no elijas cambiarle el adjetivo a los jueves, no van a dejar de ser cobardes... y creeme que hay razones para que la palabra que los suceda sea positiva...es tu decisión.
Una pena que no creas que existen razones para cambiarlo...
Una pena que no quieras olvidarlos...
Te amo
Respuestas
Giselle: no guardo mucho días cobardes, tampoco me gustan esos jueves, pero hasta ahora no se como evitarlos. a veces se escapab y a veces me encuentran, es lo que hay de éste lado del mostrador.
amor: sí, una pena que hayan vuelto. no me agradan mucho, no soy yo los jueves cobarde. Eso ya lo sabemos, intentemos juntos que desaparezcan.
cone: me mató tu mensaje, me reí mucho, pero mucho. no voy a tomar el consejo, por que si ésta ella no tengo esos días. el tema es que ayer no estaba.
pablo: no me queda mas que hacer que amarla, es así. no puedo escaparle a sus besos, a sus caricias, a nada que tenga su nombre. estoy luchando para que ya no curzarme más con los jueves. y la ronda de Vat, la podríamos hacer los jueves... una vez en cada casa a los que quieran sumarse. somos vos, yo... y los que tengan ganas de hacer un jueves pagano.
¿que te parece?
Abrazos a todos
quien más que yo?
desmitificar el dolor, eso es lo que hace falta.
y que seamos de sangre
aprender a aprovechar el segundo
un carpe diem o algo asi
que sea rock
Nosotros llevamos un momento cobarde. Y le echamos la culpa al jueves, o a cualquier otro día.
Hasta que la valentía vuelve a nosotros y arrugamos al jueves, o al día que sea, bien arrugadito...
No dudes; en ese momento, tiralo al fuego para que se convierta en cenizas.
existen en serio "decLaraciones de amor en blanco"?
para vos son Los jueves...acà son Los sabados...
Locos o cobardes o desesperados...siempre con aLgo que te hace acordar cosas de Las que ya no kerés acordarte...
Y si asì no fuera...no podrìan tener sentido esas miradas y esos abrazos que te hace voLver a descubrir Lo que te perdis con La Locura y La cobardìa...
muy bueno tu bLog
NikkY
un jueves cobarde? ke suerte la tuya...
yo soy portador de una vida de cobardía, cada minuto ke pasa hace ke tenga menos ganas de pasarlo.
no podria aconsejarte nada, realmente...kisiera haber leído esto un día de ánimo para poder darte fuerzas de alguna forma. tambien soy consciente que lo ke diga no te va a servir.
solo espero ke, junto a la persona con la ke estes ahora...logres encontrar la salida de este laberinto ke te aprisiona, ke te lastima.
y, cómo no, si encontras la forma...pasame la receta jaja
saludos caballero...
buenas... veo q postió más gente, asi que aparezco pa' contestar.
Leo: No se si verdaderamente hace falta desmitificar el dolor... no creo que el dolor sea un mito... sí es eso a lo que queres llegar, es medio confuso el concepto. por lo menos para mi.
Dilaca: ya contestó Pablo, pienso igual que el... si supieramos cual y cuando es el momento, todo sería más sencillo.
Nicole: para tu alegria o tristeza, sí existen declaraciones en blanco, por lo menos en mi mundo.
Ale: quedate tranquilo, si encuentro la receta lo voy a postear así todos se enteran... igual lo veo dificil.
abrazo a todos y gracias...
PD: no sé cuando diablos voy a postear algo que me convenza.
Exelentes crónicas de un sinfin de pensamientos/ sentimientos.
Muy buena tinta, muy existencial como dirias vos.
Me enamoré de la capacidad que tenés de desnudarte con las letras y de la aceptación de tus estados.
Seguí así!!!!!!.
Espero ver más páginas!!!!.
Florencia.
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