(texto 46)
113 noches habían pasado desde que tu silla había quedado vacía. Entre whisky, cigarros y canciones, se me apareció tu figura en la oscuridad de mi parque monótono. Era sólo una ilusión, una más entre tantas que había aguantado todos éstos días, derramando lágrimas con gusto a Jack Daniel's.
Yo sabía que tu regreso era imposible y vos sabías, que no ibas a regresar. Mientras tanto yo tejía ilusiones y me acurrucaba en las imágenes de nuestro pasado, esclavizado por el dolor. No tenía ganas de que volvieras a golpearme la puerta, pero tu ausencia me sorprendía abatido, nockeado, endeble. Estaba mejor que hace unas semanas, pero no podía resistirme a recordar -a veces- tus ojos.
Siempre te pedí que no dudes de mis dudas, pero un día te cansaste. Agarraste tus cosas, te arreglaste el maquillaje, acariciaste mi cabeza y cerraste la puerta por última vez.
Recién contaba de tus ojos, ahora que ellos no me ven, supongo que han de mirar mejor. Y si no es así, lamento decirte... los mios no tienen ganas de seguir desparramando lágrimas, la solución no es volverte a ver, tampoco perderte de vista para siempre...
He tomado la decisión de irme lejos, de conocer un mundo nuevo... me voy con mi amante despechada llamada muerte, a ella nunca le gusta perder...
Que seas muy felíz...
Yo sabía que tu regreso era imposible y vos sabías, que no ibas a regresar. Mientras tanto yo tejía ilusiones y me acurrucaba en las imágenes de nuestro pasado, esclavizado por el dolor. No tenía ganas de que volvieras a golpearme la puerta, pero tu ausencia me sorprendía abatido, nockeado, endeble. Estaba mejor que hace unas semanas, pero no podía resistirme a recordar -a veces- tus ojos.
Siempre te pedí que no dudes de mis dudas, pero un día te cansaste. Agarraste tus cosas, te arreglaste el maquillaje, acariciaste mi cabeza y cerraste la puerta por última vez.
Recién contaba de tus ojos, ahora que ellos no me ven, supongo que han de mirar mejor. Y si no es así, lamento decirte... los mios no tienen ganas de seguir desparramando lágrimas, la solución no es volverte a ver, tampoco perderte de vista para siempre...
He tomado la decisión de irme lejos, de conocer un mundo nuevo... me voy con mi amante despechada llamada muerte, a ella nunca le gusta perder...
Que seas muy felíz...