And The Moon And The Stars And The World

Long walks at night-- that's what good for the soul: peeking into windows watching tired housewives trying to fight off their beer-maddened husbands.



Charles Bukowski

Desde que mi vida empezó a girar positivamente he publicado muy poco en este blog, que tuvo mucha melancolía hace más de un año.

Hoy estoy muy felíz... y no hay melancolía. Sabemos que los poetas están hecho de eso. Lo dicen los escritos y pienso así.

Por ende, me tomo vacaciones indefinidas en este sitio.

Me voy a vivir mi cuento de hadas con todos ustedes.

Hasta cuando quieran!

an, el descalzo.

Una vez en algún lugar

Una vez en algún lugar, escuche el silencio de tu dolor. Alguna vez, en alguna realidad, me senté a tu lado a descansar. Nos sentamos. Lo merecíamos… Sin lugar a duda, o quizás sí, compartimos el mayor de los placeres hedonistas, compartimos la mirada. Tus ojos, los míos, la comunión de nuestras almas gritaban a más no poder. Gritábamos en el aterrorizante miedo de no volvernos a encontrar nunca más. Gritábamos porque sabíamos que nunca más podríamos volver a estar.

Come on in. I´ve got to tell you what state I´m in. I´ve got to tell you in my loudest tones that I´ve started looking for a warning sign. When the truth is I miss you. Yeah the truth is taht I miss you so.

Quizás nunca más podamos caminar juntos. Quizás nunca más puedas mirarme. Quizás nunca más pueda mirarte. Hasta quizás nunca más me acuerde de tu nombre ni de quien fuiste. Quizás no pueda, porque ya ni sé quien es ese espejo que me intimida cada vez que intento mirarme… No sé, no sé ya como hacer para que seguir las huellas de tus silencios. Ya no sé…

puertas

Y me animo a escribir...
por que hoy encontré la salida...
me la indicaban unos hombrecitos de color gris
y sombrero alargado... los corrí
llegué e intenté abrir la puerta,
estaba cerrada con candado...
metí la mano en mi bolsillo derecho... solo encontré algunas monedas
y un poco de tabaco vencido.
en el bolsillo de atrás sentí la billetera...
la llave estaba en el izquierdo...
la abracé fuerte con mi mano.... y metí su pico
en la cerradura del candado.
Logré abrir el candado y luego la puerta...
tomé aire, como alguna vez después de esperarla, y corrí...
me fui por aquella puerta a buscar el otro mundo.
El que todavía no encuentro.