poesía
"La poesía está en todas partes", comentó una noche y siguió parafraseando donde se encontraba eso que a veces se va lejos y no puedo encontrar.
Y yo acá... sentado en mi cama, fumando un cigarrillo y planchando un papel de chocolate, mientras empiezo a pensar y a mirar por el ventiluz de mi cuarto a las estrellas, que se esconden detrás de las nubes.
Puede ser que la poesía esté en todas partes, también depende de cuantas ganas tenga uno de ser poeta. Mientras reflexiono, el cigarrilo escupe una ceniza que se lleva el viento. El perro del vecino ladrá y rompe el silencio de la noche, ese silencio tan delicioso que muchas veces me inspira.
Tu sonrisa, por ejemplo, puede lograr que yo haga una poesía, al igual que tu boca, tu pelo, tu espalda y tu desnudéz. Hoy para mi la poesía sí está en todas partes y me está invitando a bailar.
Le doy una pitada al cigarrillo y tómo un trago de agua. El perro, de repente, no ladra más y el silencio renace en medio de ésta noche fria. Extiendo las sábanas y ahora es el turno de las frasadas... me tapo hasta la cintura. Y vuelvo a pensar en la frase de esa chica que tiene mirada de yo no fui: "La poesía está en todas partes"; ella algo debe saber de poesía, si para mi, la poesía en mi vida es ella.
Y yo acá... sentado en mi cama, fumando un cigarrillo y planchando un papel de chocolate, mientras empiezo a pensar y a mirar por el ventiluz de mi cuarto a las estrellas, que se esconden detrás de las nubes.
Puede ser que la poesía esté en todas partes, también depende de cuantas ganas tenga uno de ser poeta. Mientras reflexiono, el cigarrilo escupe una ceniza que se lleva el viento. El perro del vecino ladrá y rompe el silencio de la noche, ese silencio tan delicioso que muchas veces me inspira.
Tu sonrisa, por ejemplo, puede lograr que yo haga una poesía, al igual que tu boca, tu pelo, tu espalda y tu desnudéz. Hoy para mi la poesía sí está en todas partes y me está invitando a bailar.
Le doy una pitada al cigarrillo y tómo un trago de agua. El perro, de repente, no ladra más y el silencio renace en medio de ésta noche fria. Extiendo las sábanas y ahora es el turno de las frasadas... me tapo hasta la cintura. Y vuelvo a pensar en la frase de esa chica que tiene mirada de yo no fui: "La poesía está en todas partes"; ella algo debe saber de poesía, si para mi, la poesía en mi vida es ella.